Por Redacción - 11 Abril 2024
Durante el transcurso del pasado, se evidenció un debilitamiento en el modelo de negocio de las plataformas de streaming, manifestando los primeros indicios de su colapso. Ante esta coyuntura, los gigantes del sector, como Netflix, Disney+ y ahora Prime Video de Amazon, se vieron compelidos a tomar medidas de emergencia que marcan un retorno a ciertos elementos característicos de la televisión tradicional, paradójicamente considerados superados en el panorama digital. Una de estas medidas significativas ha sido la reintroducción de las pausas publicitarias.
Prime Video, la plataforma de streaming de Amazon, ha seguido la senda de sus competidores al incorporar la opción de incluir anuncios en su suscripción más económica. Este cambio representa un quiebre con la noción previa de que el pago de una suscripción eximiría al usuario de la presencia de anuncios molestos, una característica que durante mucho tiempo distinguió a estas plataformas de la programación televisiva convencional.
Desde esta semana, los usuarios de Prime Video en España se encuentran sujetos a la interrupción de anuncios durante la reproducción de contenido, a menos que opten por aumentar su suscripción mensual en 1,99 euros. Estos anuncios se insertarían en el desarrollo de películas y series, con una estimación de dos o tres minutos por cada hora de reproducción.
La introducción de esta nueva política ha generado reacciones encontradas en las redes sociales, donde varios usuarios expresan su descontento ante la interrupción abrupta del contenido que están disfrutando, ya sea una película o un episodio de una serie. Aunque la aparición de anuncios es ocasional y, en la mayoría de los casos, se muestran antes del inicio del contenido (sin opción de omitirlos, a diferencia de las promociones previas), este cambio representa una ruptura preocupante con la integridad del metraje de los contenidos, una característica que otras plataformas habían mantenido intacta en sus planes de suscripción con publicidad.
El movimiento de Prime Video de Amazon para incluir anuncios en su servicio refleja una adaptación forzada a las presiones del mercado y la necesidad de diversificar los ingresos en un entorno cada vez más competitivo y cambiante. Este cambio podría marcar un hito significativo en la evolución del modelo de negocio de las plataformas de streaming, aunque también plantea interrogantes sobre la dirección futura de la industria y las expectativas de los consumidores en términos de experiencia de visualización sin interrupciones publicitarias.