Por Redacción - 8 Junio 2020
La televisión fue una de las grandes ganadoras en términos de consumo durante la pandemia del coronavirus. Encerrados en sus casas por las normas del confinamiento, los ciudadanos necesitaban llenar sus horas con contenidos y con elementos que les ayudasen a pasar el tiempo. Así, se volcaron en ciertas actividades (no hay que olvidar el frenesí con el que todo el país se entregó a hacer pasteles y pan en casa) pero también se sentaron delante del televisor. Tanto, de hecho, que las cadenas de televisión lograron máximos históricos de audiencia: los españoles estaban pasando más tiempo al día delante de la tele que nunca.
Los programas informativos y los magazines que asumían temas de actualidad (desde los matinales al Sálvame, que se convirtió en una inesperada referencia en los tiempos del coronavirus) reunían a masas de espectadores. Las televisiones llegaron a máximos de 325 minutos de televisión por día de consumo por individuo (como unas 5 horas y media). De media, cada español había sumado dos horas diarias a su consumo de televisión.
Pero estaba claro desde un primer momento que esos datos no se iban a mantener para siempre. En Italia, que había empezado el proceso de confinamiento semanas antes, se había producido un proceso similar. Los informativos tuvieron picos históricos de audiencia, hasta que tras semanas de lo mismo las audiencias empezaron a saturarse de esos contenidos.
¿Qué ha pasado en España? ¿Y cómo está cambiando los datos de audiencia el que el país haya empezado ya el proceso de desescalada? Un estudio de Barlovento Comunicación, que parte de cifras de Kantar, ha analizado la situación y cómo se está pinchando la burbuja de las audiencias de las televisiones.
Los 325 minutos diarios medios por persona con los que empezó la crisis han pasado ahora (son los datos de la última semana) a 237 minutos (un poco por debajo de las 4 horas de consumo de televisión). Se han perdido 88 minutos por persona y día en consumo televisivo.
A pesar de esta caída, la televisión sigue acumulando datos históricos de visionado. En mayo se vieron 260 minutos de televisión por persona y día de media en España, lo que supone que mayo de 2020 se ha convertido en el "mayo de mayor consumo de la historia". Es decir, nunca en un mes de mayo tanta gente había destinado tanto tiempo a la tele.
El hecho de que algunas comunidades autónomas hayan pasado a fase dos ha hecho que en esas zonas se vea menos la tele. De media, entre unas y otras, solo hay una diferencia de 7 minutos, pero algunos casos son más notables. En Asturias, por ejemplo, se perdieron dos horas de consumo de televisión medio por día.
A eso hay que sumar que las pérdidas de audiencia son en grupos en los que había subido de forma notable o en los que la tele estaba encontrando una vía que habitualmente no tiene. En términos porcentuales, la mayor caída es entre los jóvenes de 13 a 24 años, que han perdido el 36,5% del consumo de televisión. En minutos, la mayor caída ha estado en los ciudadanos de 45 a 64 años, que han retrocedido en 117 minutos.
Por tanto, es de esperar que progresivamente la televisión vuelva a la normalidad y que, cuando se llegue al final de la desescalada, esté más cerca de sus datos medios habituales que de los picos de audiencias que tuvo durante el confinamiento.