La Netnografía es una nueva disciplina, y en cierto sentido una teoría en construcción, deudora directa de otras disciplinas tales como la Antropología social y cultural, la Sociología y la Psicología, con una clara vocación de entender y contextualizar el comportamiento humano y las distintas realidades sociales en las que se concreta.
Pero no podemos entender la Netnografía, y el espacio propio e intelectual que reclama, sin mirarlo a la luz del impacto disruptivo que la aparición de Internet, y la web 2.0,ha supuesto en la forma de vivir,relacionarse y entender "la realidad social" para el común de los mortales.
"Ciberespacio", "Cibercultura", "Cultura" y "Sociabilidad" son ideas que se van volviendo partes indisolubles de una misma realidad social compleja y poliédrica que se expande y desarrolla más allá de la anécdota, cada día más irrelevante, de si lo hace de forma "conectada"Online o como en la antigua era analógica, sin mediar máquina, de forma Offline.
Bits y átomos, como el ying y el yang, están condenados a entenderse, a disolver sus fronteras cada día más artificiales y ofrecernos las dos caras de una misma realidad, única e indisoluble, La sociabilidad humana.
Internet y la Web 2.0 deben ser vistos como fenómenos necesariamente disruptivos, en la medida en la que cambian "las reglas del juego" y enuncian un nuevo paradigma donde el hombre y todo su espectro de actividades, quedan necesariamente "alteradas" o modificadas, al menos en sus procesos, al ser entendidos a la luz de un nuevo marco de posibilidades.
La penetración de Internet de forma masiva y planetaria en los hogares a partir del uso inicial profesional y científico de Arpanet, sumada a la progresiva mejora del diseño de la experiencia de usuario, el desarrollo de código orientado a lo social y el imparable ascenso de la web 2.0. Tienen un impacto evidente en la Economía, el Derecho, la Identidad y la Cultura. De tal forma que cada vez más ramas de las ciencias sociales irán aceptando la lógica necesidad, de investigar, analizar y comprender lo que las personas hacen y cómo se relacionan en Internet. Probablemente, y con el tiempo, la red de redes, termine convirtiéndose en la principal fuente de estudio para todas estas ciencias sociales.
Una única experiencia psicológica y social de millones de personas por todo el planeta, comprando, debatiendo, relacionándose, aprendiendo, opinando, ligando, produciendo contenidos, y en definitiva, creando cultura, de forma síncrona o asíncrona, y sin límites ni restricciones aparentes.
Es como si por primera vez en la Historia dispusiésemos de un enorme tubo de ensayo donde el hombre de forma espontánea vertiese todos los rasgos particulares de su "sociabilidad" en las distintas facetas que conforman su vida moderna. Y toda esta información quedase contenida y lista para su rastreo, estudio y posible monitorización. La "oportunidad" científica que tiene el hombre para observarse a sí mismo a escala planetaria y tratar de comprenderse no tiene antecedentes.
Me gusta imaginar las posibilidades ilimitadas para bucear en todo este contenido que Internet ofrecerá a los investigadores del futuro, que dispondrán de una suerte de "Inconsciente colectivo" rastreable, monitorizabley en constante desarrollo.
A veces me pregunto si con el nacimiento y expansión de Internet en su versión más social no podremos hablar por primera vez, y con verdadero conocimiento de causa, de "La Humanidad" como ente autónomo,como ecosistema susceptible de ser verdaderamente observado y estudiado.