A estas alturas no deja de sorprender como en la mayor parte de las empresas siguen bloqueando el acceso a las redes sociales a sus trabajadores, incluso cuando algunas de las empresas que realizan esta práctica, tiene presencia en estos canales.
Supongo que es fruto del desconocimiento de las posibilidades que las Redes Sociales ofrecen, a la indefinición del buen uso de las redes sociales en la empresa, debido a la inexistencia del manual de acogida 2.0, y al desfase tecnológico existente todavía en un porcentaje muy significativo de las PyMES.
Cuando revisas datos sobre uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en las empresas, sorprende cómo todavía entre las empresas que sí que tienen conexión a internet, un 40% no dispone de página web, o como todavía existe cerca de un 4% de empresas que no disponen de correo electrónico, algo básico en pleno Siglo XXI.
En cuanto a Comercio Electrónico, sólo el 12,2% de las empresas realizaron ventas mediante este sistema, siendo la mayor parte de estas empresas del sector de los servicios de alojamientos (76,6%)
Conocidos estos datos, incluso se puede llegar a entender que algunas empresas todavía no comprendan que las redes sociales suponen una fuente de información muy importante, en tiempo real, que pueden servir de mucha ayuda para buena parte de los departamentos de cualquier empresa.
Quizás todavía no vean que gracias a estas herramientas, el departamento de Recursos Humanos puede llegar a localizar a grandes profesionales para cubrir determinados aspectos de la organización, conociendo en tiempo real, su trayectoria y conocimientos sobre la materia, o que gracias a los Social Media el departamento de comunicación estará informado en tiempo real de aquello que pueda preocupar a la organización en un momento dado.
Censurar el acceso a las redes sociales en la empresa no es una buena práctica ni la mejor opción, en todo caso, habrá que formar a los empleados sobre el buen uso que pueden hacer de estas herramientas en beneficio de la organización.
No obstante, todavía queda mucho camino por recorrer en el desarrollo tecnológico de las PyMES y una vez alcancen su punto álgido, podrán empezar a vislumbrar los beneficios que pueden aportarles la web 2.0 y las Redes Sociales.