Como siempre digo, no es la primera ni la última vez que leemos una noticia como esta: "Bruselas multa con 1.500 millones de Euros a fabricantes de televisores".
Pues si resulta que la multa, la más alta que se ha impuesto desde la Unión Europea a cualquier cártel, se ha justificado por el "grave perjuicio ocasionado a los fabricantes de televisores y ordenadores".
Parece ser que la lista de empresas multadas, LG, Philips, Samsung, Panasonic o Toshiba participaban desde hacía 10 años en acuerdos ilegales para pactar precios y repartirse cuota de mercado para la producción de tubos catódicos para televisores y ordenadores.
Según declaraciones del responsable de la competencia de la UE, el español Joaquín Almunia, "son un caso de libro, concentran las perores formas de prácticas contrarias a la competencia que están estrictamente prohibidas en la UE".
La verdad es que el tono de las declaraciones me parecen lo suficientemente graves y contundentes por parte de un comisario y vicepresidente de la UE. También es cierto que tal vez dichas marcas se lo han ganado a pulso ya que han estado haciendo estas malas prácticas durante 10 años, nada más ni nada menos.
Como siempre ante estas situaciones me surgen las siguientes dudas:
Alguien podrá decir que las empresas no eran conscientes de lo que hacían, pero según la investigación llevada acabo por la UE dichas empresas eran conscientes de la vulneración de las leyes europeas.
La verdad es que me sigue sorprendiendo leer noticias como estas, por que parece que no coincide lo que dicen las marcas con lo que hacen y es ahí donde se genera un gap de reputación que en este caso les ha llevado a ser "castigados" con la mayor multa que ha impuesto nunca la UE. Una pena