He dicho. Y lo digo por ser conocedor del trabajo de muchas empresas y profesionales. A pesar de las críticas constantes de algunos aguafiestas y "cansinos históricos" capaces de superar al mismísimopersonaje de José Mota, y que llevan la crítica en boca día tras díapara ser el centro de las polémicas, mi intención es la de confirmar, poniendo de relieve el buen hacer y el trabajo de las empresas y profesionales de nuestros país.
Como es lógico, dentro detoda industria y sobre todo en esta,tan extensa, encontraremos mejores y peores, buenos y malos. Pero no tengamos dudas de que a pesar de las barreras y los problemas a los que las empresas se enfrentan en un escenario como el actual, donde la crisis dificulta el crecimiento y la proliferación de muchas de ellas, las empresas y profesionales españoles siguen dando la talla.
No voy a dejar nombres propios y ejemplos para evitar las comparaciones que siempre son odiosas. Pero el solo hecho de pensar que nuestro país no es cuna de grandes profesionales, es estar perdido en el limbo de las realidades. Y sí, que por ahí fuera, existen auténticos genios y empresas de las que podemos tomar ejemplo y aprender. Sin duda. Pero aquí también sabemos innovar y sabemos hacer muchas cosas bien y mejor.
Personalmente no me vale aquello de medir la creatividad y el buen hacer de las empresas y profesionalespor el hecho de sumar más o menospremios y nominaciones. Cierto es que a nadie le disgustan tales reconocimientos, pero al final, de nada sirven más quepara alimentar elego. No se puede despreciar el trabajo de todo el mundo, por el simple hecho de que algunosdestaquen por encima del resto.
España es un país que a pesar de todo, evoluciona. Y en esta evolución, sus empresas y profesionales también lo hacen con gran competitividad dentro y fuera de nuestras fronteras. Aquí también nos gusta cambiar cosas y también innovamos y somos referentes en muchas otras. Incluso nuestras marcas más populares son envidiadas por su singularidad, proyección y grandes logros.
No vale de nada decir continuamente que las empresas españoles tienen que mejorar, aprender de otras o menospreciarlas por sus carencias y/o errores. Es más importante, ser realista y transmitir con apoyo, ese ánimo emprendedor para que evolucionen por sí mismas, con su trabajo y constancia. Y siendo este mejor o peor, contar siempre con el apoyo y la crítica constructiva, sin llegar a ser el cruel que desprecia todolo que suena aEspañol. La verdad, es queuno se cansa de tanta crítica destructiva.
Las agencias españolas, los profesionales de la publicidad y del marketing, los expertos del social media, los emprendedores,... Todos ellos se encuentran afrontando con ilusiónlos grandes retos de sus vidas profesionales dando lo mejor y aprovechando cada una de las oportunidades que la suerte, la vida y el destino les pone en su camino. Igual que tenemos grandes médicos, científicos, escritores...
Que nadie dude de que España, independientemente de las circunstancias y el marco socio-económico, tenemos de todo lo mejor, siempre un poco. Y entre el resto, grandes profesionales capaces de competir al más alto nivel.
Yo no voy a criticar ni marcar el ritmo de nadie porque confío plenamente en el talento y la creatividadde los profesionales y empresas denuestro país. Y por ello, siempre apoyaré a que se siga innovando, creciendo y mejorando sin mirar atrás. Pero ante todo, nunca dudaré de quela agencias y profesionales españoles de nuestro sectorno están a la altura a pesar de las circunstancias y los malos tiempos.