En el libro que estoy escribiendo este verano estoy desarrollando los elementos del Branding Personal relacionados con la visibilidad y la notoriedad en los que no había profundizado en los libros anteriores. Estoy terminando la fase de investigación pero cada paso que doy estoy más convencido que hay aspectos más importantes que otros para conseguir alcanzar un nivel de posicionamiento que te ayude a alcanzar determinados objetivos.
Creo que en dospuntocerolandia la herramienta, plataforma, altavoz o medio por excelencia es el blog. Lo he dicho aquí en algunas ocasiones pero cada día estoy más convencido de que bien utilizado puede proporcionar una credibilidad, relevancia y visibilidad que otras herramientas “accesorias” no proporcionan. Y esas son las claves de una buena estrategia de Marca Personal.
Además, estoy viendo con satisfacción que algunas personas que tuvieron blog están empezando a retomarlo o, al menos eso dicen.
El blog tiene muchas ventajas. Para alguien tan disperso como yo, es una forma magnífica de poner un poco de orden en sus pensamientos. En realidad, esa fue la razón por la que empecé con el mío hace ocho años. Simplemente necesitaba un sitio en el que ordenar las ideas que iban surgiendo y que acabaron dando forma a mi visión del Branding Personal. Además me sirve, a mí o a cualquiera que tenga la santa paciencia de revisar lo que he publicado, para ver como he evolucionado y para comprobar muchas de las estupideces y errores que pueden cometerse.
El blog es un medio extraordinario y amigable para entrar en dospuntocerolandia. Para aquellos que, cuando se habla de tecnología, suelen decir con frecuencia aquello de “es que estoy muy mayor para estas cosas”, el blog les quita gran parte de ese argumento.
El blog, o mejor dicho, los lectores del blog se han convertido para mí en una especie de Pepito Grillo que me orientan y me dicen lo que tengo que hacer cuando me desvío o desvarío. Es muy fácil empezar a decir chorradas cuando llevas un tiempo trabajando delante de una pantalla y desconectado del mundo real. Los comentarios que he recibido en estos años me han sido mucho más útiles de lo que podrías pensar.
Pero sobre todo, el blog se ha convertido en mi tarjeta de presentación. Es el sitio que mejor me define. Después de casi mil trescientos posts uno no puede engañar a nadie, pero algo más importante, uno no puede mentirse a sí mismo. Es una especie de psicoanálisis que te descubre lo que realmente eres. Y cuando hablamos de Marca Personal ¿No es eso de lo que se trata?
Creo que está claro que para mí el blog es el Santo Grial, la piedra filosofal, el huevo de Colón y la Caja de Pandora del posicionamiento de una Marca Personal en La Red. Todo lo demás, son accesorios.
Así que si a estas alturas del post piensas que esto está muy bien (o no) pero ya tienes en mente las excusas habituales (es que esto de la “informática” no es lo mío, no me gusta escribir, no se escribir, me da vergüenza decir lo que pienso, no tengo tiempo y tantas otras), más vale que empieces a encontrar formas de superarlas o seguirás igual que ahora o quizás peor porque te estarás quedando atrás.
Larga vida al blog.