Resulta incuestionable, dentro del mundo globalizado en el que vivimos, el impacto mundial que produce día a día el deporte, principalmente el fútbol. Nadie se extraña al observar cómo familias en Arabia Saudí, Japón o México celebran con la misma intensidad que un madrileño de pura cepa la Champions League conseguida recientemente por el Real Madrid.
Ese poder característico del deporte rey es el que, cada vez más, se reparten entre los dos actores fundamentales que acompañan a clubs y jugadores en este crecimiento que no entiende de fronteras: periodistas y sponsors (marcas).
La relación entre periodistas deportivos y marcas es algo habitual cuando observamos algún espacio informativo en el que sus presentadores publicitan varios productos por programa. Sin embargo, es algo menos frecuente encontrarse con esta situación en las redes sociales personales de cada comunicador, si bien es cierto que cada vez aparecen más casos. La relevancia mediática de algunos periodistas deportivos en las redes sociales, principalmente Twitter, es un hecho que no debe pasar inadvertido para ninguna marca.
Hay cuatro motivos fundamentales para que una marca, que desea asociarse con el deporte, no pierda la oportunidad de contar, como uno de sus activos, con algún referente de la comunicación deportiva:
Debido a la constante metamorfosis de las redes sociales así como de la elaboración de contenidos deportivos, los referentes a tener en cuenta por las marcas para amplificar su mensaje pueden cambiar. En cualquier caso, parece garantizada la existencia de estos líderes de la comunicación, que seguirán aumentando su influencia en el mundo 2.0 y que están disponibles para generar sinergias entre información y contenido esponsorizado por marcas.