Por Redacción - 4 Febrero 2016
El smartphone es, actualmente, el mejor amigo del consumidor. Es quien pasa 24 horas a su lado, lo primero que mira al despertar y lo último que contempla antes de cerrar los ojos. Y de la misma manera que el móvil ha transformado por completo nuestra forma de comunicarnos, de entretenernos o de informarnos, también ha dado un giro de 180 grados a nuestra forma de comprar y relacionarnos con las marcas.
Así, acciones como investigar un producto en la web móvil, comparar precios o hacer una sugerencia a través de las redes sociales se han convertido en algo cotidiano. Sin embargo, muchos consumidores siguen encontrando en la compra a través del ordenador (o incluso en la propia tienda) facilidades que no hallan vía móvil. Algo que se refleja en el último estudio de Facebook IQ y GfK, publicado por Forbes, y cuya conclusión es que los vendedores deberían prestar más atención a facilitar el proceso de compra a través de smartphones y tabletas. Entre otras cosas porque los propios consumidores así lo piden: el 70% considera que las experiencia de compra vía web y app puede mejorar mucho.
Y es que más de la mitad de los consumidores aseguran que es más fácil ver los productos disponibles en una tienda online desde el ordenador, así como que es más fácil usar dispositivos con pantallas más grandes. Aunque cada vez las "phablets", con pantallas mayores, ganan más cuota de mercado, está claro que un móvil siempre será más pequeño que un ordenador, pero justamente por eso los retailers deberían buscar formas adaptadas para mostrar su catálogo que resulten claras y cómodas también en el móvil.
Por otro lado, el 27% de los encuestados considera difícil comparar productos y diferentes retailers a través de la web, y para el 26%, los formularios para incluir los datos personales son poco user-friendly en tabletas y smartphones. Teniendo en cuenta que nada de esto para a los consumidores, pues el 71% compara precios a través de este dispositivo, facilitarle la labor al cliente puede acabar suponiendo una ventaja comparativa.
Ecommerce, mcommerce y tiendas físicas están hechos para complementarse
El estudio también analiza la compra móvil respecto a la que se efectúa en la propia tienda, y aunque hay varios factores intrínsecos a la experiencia física que no son comparables: para el 25% de los consumidores ir de compras es una actividad de ocio, agradable, y al 47% les gusta poder tocar y ver directamente los productos, hay otras cuestiones donde el móvil si podría plantar cara a la experiencia en tienda. Para el 46% de los compradores un problema de comprar vía móvil es que hay que esperar varios días para recibir el producto, algo que no ocurriría si existiesen modelos de envío más rápidos. De la misma manera, los altos costes de envío echan a muchos consumidores para atrás a la hora de comprar online.
El informe hace hincapié en que los hábitos de compra están cambiando como consecuencia de la introducción de los dispositivos móviles, pero no tiene sentido tratar este canal como algo diferente, apartado del resto de las vías de compra. Los consumidores, especialmente los más jóvenes, no hacen distinciones de ningún tipo, y quieren poder usar sus dispositivos indistintamente a lo largo del proceso de compra. Los retailers deben apostar por una estrategia multicanal que se dirija al consumidor con mensajes adaptados a cada dispositivo, ofreciendo una experiencia cohesionada y sin fisuras.