Por Redacción - 10 Octubre 2017
La idea no es nueva y por tanto no es la primera vez que se rumorea que la compañía podría estar preparando algo de este estilo. En 2016, ya se señalaba que Amazon podría estar preparando su propio servicio de mensajería. Los analistas señalaban que estaba entre quienes podrían compran entonces una compañía de logística y que estaba ya en el accionariado de otras. A eso se sumaba que estaba creando su propia flotilla de camiones en EEUU. Amazon, apuntaban entonces los analistas, parecía estar sentando las bases de su propio servicio de mensajería.
Las razones por las que los expertos apuntaban entonces que el movimiento tenía mucha lógica siguen siendo, además, válidas ahora mismo. Amazon entonces había vivido una campaña de Navidad en la que se había enfrentado a problemas por culpa de sus propias compañías de mensajería, algo que no le ha dejado de pasar en los últimos tiempos. En la última campaña de Navidad en España, por ejemplo, no fueron pocos los consumidores que vieron como sus productos llegaban mucho más tarde de lo que esperaban, a pesar de las promesas de Amazon. Como apuntaban entonces los medios, la culpa no era tanto de Amazon como de las compañías que se encargaban del reparto de sus compras. Estaban desbordadas por un exceso de compras que ya había empezado en el Black Friday.
La compañía es una además de las que comprende la importancia de ofrecer una buena entrega de productos, como ha demostrado a lo largo de los años preocupándose por su packaging hasta el extremo o reduciendo tiempos de entrega. Pero en el proceso mismo de la misma no puede tener el control y debe confiar en lo que hacen los demás. Que intente asumir más control tiene, por tanto, cierta lógica.
¿Qué es lo último que está probando? Según han desvelado desde Bloomberg, la compañía está probando un nuevo sistema de entregas en el que tendrá mucho más control en lo que hacen las compañías que hacen las entregas en EEUU. Amazon ha importado lo que ya está haciendo en India a Estados Unidos y lo pondrá en marcha en 2018.
Lo que empezará a hacer en EEUU
¿Cómo funcionará? Básicamente, Amazon va a tomar el control de lo que ocurre. Ellos serán los encargados de controlar cómo se recogen paquetes de terceras partes y cómo se lleva a la casa de los consumidores, algo que ahora hacen las empresas de mensajería. Amazon no las eliminará exactamente del todo, porque estas empresas serán las que hagan la entrega, pero Amazon tendrá mucho más poder y peso. El gigante del ecommerce será el que decida cómo se envían las cosas.
De entrada, el formato les dará más control dentro de la entrega de productos que otros venden a través de la plataforma con los beneficios de entrega de Prime, pero lo cierto es que el movimiento hace que la compañía tenga mucho más peso dentro del trabajo que hasta ahora dejaba en manos de terceros. Y, sobre todo, el movimiento hará que Amazon tenga una posición más de poder en el terreno de la logística.
Como apuntan los analistas, que la compañía se vaya a lanzar a hacer esto deja es como una pista más para comprender que Amazon tiene sus propias ambiciones en lo que a logística se refiere y a tener el control directo de la misma. La compañía no quiere volver a quedarse en una posición de debilidad porque sus encargados de entregar productos no han sido capaces de soportar la avalancha de compras.
Para las compañías de logística esta es una señal más de alerta de que Amazon podría cambiar las reglas. Teniendo en cuenta que para muchas de ellas el gigante del ecommerce es uno de sus grandes clientes, un cambio de reglas podría tener importantes consecuencias.