Los smartphones se han convertido en una extensión más de los consumidores. Los llevan siempre con ellos, los usan para muchas y muy variadas cosas o son la herramienta que les permite estar siempre en contacto con sus amigos y sus familiares. Los móviles han modificado cómo se accede a los contenidos, cómo se consume entretenimiento o hasta quién domina y quién no en ese último mercado. Su influencia es cada vez mayor y pensar que esto no iba a afectar a cómo se compra y cómo no habría sido dar un paso en falso.

Las decisiones de consumo están cada vez más marcadas por lo que el móvil permite hacer. ¿Quién no ha echado mano al bolsillo para ver qué podía encontrar sobre ese producto online antes de comprarlo en una tienda cualquiera? ¿Quién no ha comentado en vivo y en directo lo que estaba comprando en un chat de Whatsapp dejándose aconsejar por lo que decían los amigos con los que hablaba? Pero, al mismo tiempo, el móvil se ha convertido en una poderosa herramienta de ventas.

Puede que hace unos años comprar desde el móvil nos pareciese arriesgado o algo poco cómodo. Ahora es un comportamiento más de nuestro día a día y uno que es cada vez más habitual y recurrente. Tanto es así que el móvil es ya el gran protagonista de esta campaña de Navidad. El punto clave de los resultados que se están obteniendo es que el móvil tiene cada vez más ascendente en ellos.

Las previsiones y los análisis de lo que está ocurriendo en estas Navidades dejan claro que el móvil es una parte decisiva. El último estudio de Adobe, sobre una muestra estadounidense, ya marca que más de la mitad de las compras se están haciendo desde dispositivos móviles. El año, en general, está siendo bueno.

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