Estamos más que acostumbrados a la digitalización. Pero ¿y si ocurre precisamente lo contrario? El máximo nivel de omnicanalidad llegó hace unas semanas con la apertura de la primera tienda física del gigante AliExpress en Madrid convirtiéndose en su primer establecimiento en España y en Europa. La noticia eclipsó por completo la actualidad del último domingo de agosto: servicios de emergencia activados, sacos de dormir para los que no podían resistir la espera (los 500 primeros tenían regalo asegurado por parte de la compañía). ¿Qué es lo que está pasando?
El consumidor actual ya no se conforma con navegar por la red. Quiere ir un paso más allá. Tocar productos, descubrir novedades y nuevas marcas. Formar parte de la experiencia de consumo y conseguir lo que quiere al momento. ¿Por qué esperar a recibir el pedido si puede adquirirlo en la tienda? Y no en una tienda cualquiera. Estamos ante un auténtico fenómeno de masas (EN MAYÚSCULAS). Es un ejemplo de cómo potenciar la experiencia de un e-commerce abriendo paso a un mundo entero de posibilidades, vivencias y sensaciones que uno sólo puede vivir en una tienda física (en este caso, de nada más y nada menos que de 700 metros cuadrados).
No es la primera vez que todo un "monstruo" del e-commerce sorprende al mundo entero con un cambio de rumbo estratégico. ¿A quién no le viene a la mente Amazon Go? Del online al offline en el sitio adecuado y ni tan siquiera con cajas. La lista de beneficios puede ser kilométrica empezando por un refuerzo más que notorio de la imagen de marca. Se gana cercanía, empatía y accesibilidad a ojos del consumidor, pilares emocionales esenciales en el largo camino de su fidelización. Al fin y al cabo, una (buena) experiencia (y cuanto más real mejor) es la clave.
Y esto no es todo. La fusión entre Carrefour y Glovo está a la vuelta de la esquina, un sorprendente dúo para conseguir agilizar las entregas de los pedidos de supermercado. Se acabó ir cargado hasta las cejas con la compra semanal. París, Sevilla, Valencia, Milán, Roma y Buenos Aires han sido las primeras ciudades elegidas a partir de este mes de octubre, pero parece que la lista crecerá. Una muestra más de la sed de inmediatez de los consumidores que parece no saciarse.
Mientras todo el sector está volcado en potenciar el online, los gigantes del retail digital se están dando cuenta de las grandes ventajas que ofrece la tienda física al consumidor y están intentando responder a estas otras necesidades para ofrecer una experiencia de compra lo más completa posible. La línea que separa el online del offline está cada vez más difuminada y en el punto medio se encuentra el éxito para satisfacer las cambiantes y variadas necesidades de los consumidores actuales. Si algo está claro es que cada canal tiene sus beneficios y los retailers que sepan aprovecharse de lo mejor de cada uno serán los grandes ganadores en este juego.
Bendita omnicanalidad.