Por Redacción - 20 Abril 2020
Entre los anuncios que me esperan estos días en el feed de Facebook, cada vez hay más sobre comercio electrónico y cada vez lo son de cosas más diversas.
Dado que el confinamiento por el coronavirus nos ha encerrado en casa y las opciones de consumo se limitan a los productos de primera necesidad o a lo que se puede comprar online, cada vez son más quienes intentan vender en la red. En Facebook, por ejemplo, los zumos Don Simón llevan varios días intentando convencerme de que me haga con un lote de varios litros, que ya ellos se encargan de mandármelo a casa.
No son los únicos que intentan posicionar su tienda online o que emplean el ecommerce como vía de conexión con los consumidores. Ahora mismo, el comercio electrónico se ha asentado como plataforma y más que nunca se puede comprar de todo. Players habituales o que han intentado posicionarse en los últimos años lo están haciendo. Ikea, por ejemplo, es otro habitual de las campañas en social media, recordando que venden con envío a casa muchas cosas que pueden ayudar a crear la oficina en casa. También se han añadido nuevos jugadores.
Por ejemplo, es lo que hace Peugeot. La compañía de automoción tiene una Peugeot Webstore, en la que están disponibles 9.000 vehículos. Como recuerdan en una nota de prensa, el internauta puede reservar ya desde la red su coche e incluso hacer estimaciones de financiación. A finales de marzo ya recordaban que sus coches se podían probar desde casa: con Peugeot Amplified Experience se puede emplear la realidad virtual para descubrir sus coches. Si los consumidores no pueden ir al concesionario, pueden vivir la experiencia desde casa.
Otra compañía que ha migrado actividad al comercio electrónico es Estrella Galicia. La compañía acaba de arrancar su tienda online, con la que intenta cubrir todo el estado aunque en su estreno, y en pruebas, solo vende en Galicia.
La apertura de tiendas online estos días también tiene a la firma de productos gourmet Casa Ortega, que vende en la red ahora, y a muchas tiendas de barrio y marcas de proximidad que han creado infraestructuras para estos días. En las redes sociales, los anuncios venden frutas y verduras a domicilio, productos gourmet o líquido para limpiar lentillas.
El movimiento tiene lógica y casi es de esperar que, si el confinamiento se extiende, más players intenten usar la red para vender más tipos de productos. Aunque, aun así, el ecommerce podría enfrentarse a una realidad compleja, como apuntan en eMarketer analizando lo que está ocurriendo en algunos mercados europeos.
Mover las ventas a la red no implica necesariamente que los consumidores vayan a dar el salto. Teniendo en cuenta que los datos de otros estudios muestran que los consumidores están cada vez más preocupados por la situación económica, se puede imaginar que serán reticentes a gastar dinero.
En Alemania, por ejemplo y volviendo a los datos de eMarketer, a pesar de que se esperaba que el confinamiento ampliase las ventas, los datos del ecommerce no apuntan en esa dirección. El 41% de las tiendas online reconoce que las compras han caído. Se han reducido las cifras de pedidos. Los que han ganado, sin embargo, son los supermercados y los demás vendedores de productos frescos online.
Las ventas de supermercados online en auge son, de hecho, una de las grandes tendencias en la Europa del coronavirus. Dinamarca o Suiza también han visto un crecimiento brutal, algo similar a lo que ha pasado en España. No todos los supermercados son capaces de seguir el ritmo y algunos se están enfrentando a problemas a la hora de cumplir los plazos rápido de entregas, que se convierten en mucho más extensos.