Seguramente te estés preguntando: ¿otra generación más? Afirmativo, otra generación más. En este caso, venimos a hablaros de los Zillennials. Quizás no hayáis oído hablar mucho sobre ellos hasta ahora, pero vienen pisando fuerte y reclaman su espacio y protagonismo.
Los Zillennials son además Cuspers, otro término que mucha gente desconoce (yo mismo hasta ponerme a indagar para este artículo). Es un término que sin duda caracteriza a esta generación y que hace referencia a las personas que nacen entre el final de una generación y el inicio de otra. Las generaciones se pueden superponer entre cinco y ocho años. Es por este motivo que muchas personas se identifican con señas de identidad de al menos dos generaciones distintas. Algunas de las generaciones Cuspers previas a los Zillennials son la Generación Jones o la Generación Swing.
En concreto, los Zillennials son aquellas personas nacidas después de los Millennials y antes que los miembros de la Generación Z. Muchos cuspers afirman no sentirse identificados entre la generación previa y la posterior, lo que algunos expertos llaman la teoría de la confusión generacional.
Pero volvamos a los Zillennials; ¿Quiénes son? ¿Qué les gusta? ¿Qué buscan en las marcas, servicios y productos que consumen?
Los Zillennials se definen como demasiado cool para relacionarse con los Millennials y a la vez demasiado maduros como para ser considerados Gen Z. Una buena comparación podría ser que se sienten como el hermano mediano en una familia de tres, que no se le hace mucho caso y no es referente como el hermano mayor (Millennial) o cuidado como el hermano pequeño (Gen Z).
La mayoría de expertos los identifican como aquellos nacidos entre 1993 y 1998; o aquellos que se graduaron del instituto entre 2012 y 2016. Aun así, no hay unanimidad al respecto, con algunos expertos iniciando los Zillennials en 1992 y otros afirmando que incluye hasta los nacidos en el 2000.
Algunos de los factores de identificación con los que se asocia a esta generación es el ser los últimos en disfrutar de los VideoClubs, vivieron la transición del VHS al DVD y crecieron en su etapa adolescente dominando los primeros smartphones.
Son un porcentaje de la población relevante. En Estados Unidos, representan más de 30 millones de habitantes. ¿En España? Casi llegan a los 5 millones. Esto hace que, en las poblaciones occidentales, el porcentaje de Zillennials sobre el total de la población sea de alrededor del 10%.
Esta generación, tiene en la actualidad entre 24 y 29 años y sus particularidades deben tenerse en cuenta a la hora de desarrollar estrategias de publicidad. Por lo tanto, ¿qué rasgos son los más interesantes de los Zillennials para las marcas?
Disfrutan de un poder adquisitivo más alto del que muchos piensan
La mitad (48%) de los Zillennials con trabajo no se han independizado aún de sus padres, por lo que están exentos, por lo general, de los gastos de renta, hipoteca, gastos del hogar, la cada vez más cara compra semanal y demás gastos a los que tiene que hacer frente la gente que tuvo la brillante idea de independizarse (como el joven millennial que escribe estas líneas). Esto implica que están dispuestos a gastar gran parte de sus ingresos en experiencias, hobbies y en sus marcas y productos favoritos.
Están dispuestos a compartir información y datos para las marcas
Alrededor de un 70% de Zillennials comparte datos personales de interés para marcas y servicios online. Esta cifra ha aumentado especialmente en el último año, sobre todo acceden a ello a cambio de descuentos u ofertas, y estratégicamente es un ganar-ganar para las marcas que sepan aprovecharlo.
Generación que consume más lujo y desde más jóvenes
Compran lujo antes que las generaciones previas. Los Zillennials y Gen Z empiezan a consumir productos de lujo entre 3 a 5 años antes que los Millennials y otras generaciones anteriores. Además, representan un porcentaje importante del total de compras del lujo. Entre Millennials, Gen Z y Zillennials, se estima que en 2025 realizarán más del 70% de las compras de productos y servicios de lujo.
Tengamos en cuenta que los Zillennials han visto en casa cómo sus padres y abuelos han sufrido con las distintas crisis de los últimos años, por lo que tienen una mayor conciencia del gasto y analizan más cómo gastar el dinero. De ahí, el resurgimiento en esta generación del uso de la segunda mano y productos vintage.
Apuestan por marcas con propósito
Alrededor del 80% de Zillennials están dispuestos a pagar más por productos y marcas sostenibles o con propósito social. El 75% de Zillennials afirma dar más importancia a la sostenibilidad del producto que al nombre de la marca.
Disfrutan del formato vídeo y del live-stream
Esta generación prioriza el vídeo a la foto y es amante del contenido en directo, de la espontaneidad y de las salidas de guión. Twitch tiene un tirón muy fuerte en esta generación y las marcas pueden encontrar una oportunidad en capitalizar el livestream, de hecho, en los últimos estudios de mercado como The Savvy Consumer o Decentralised Communities realizado por Samy Alliance, se destaca el potencial que están teniendo estas plataformas para nichos muy específicos. ¿Contacto directo con generación comprometida? No es una oportunidad que deba ignorarse, o no debería.
Son la micro-generación más insatisfecha con su trabajo
Un estudio de MetLife refleja que los Zillennials son la generación más insatisfecha de todas con su trabajo. Un 42% de jóvenes de esta generación no está satisfecho con su trabajo, por un 41% de la Gen Z y un 34% de los Millennials. Por ello, buscan desconectar, disfrutar y aprovechar al máximo el tiempo libre, siendo una generación que prioriza el gasto presente (viajes, ocio, gaming, etc.) que el ahorro para inversión futura.
Es una generación cambiante
La mayoría de los Zillennials se independizarán en los próximos años y muchos comenzarán a formar su hogar desde cero, por lo que los hábitos de consumo y la priorización del gasto cambiará por completo y no dentro de mucho tiempo.
Podríamos resumir a los Zillennials como una micro-generación entre generaciones, con un poder adquisitivo superior al que uno puede esperar y que prioriza el propósito a la marca. Una generación con las cosas claras, pero una generación a punto de cambiar, por lo que si yo fuera una marca, actuaría ya.