Por Redacción - 10 Mayo 2021
Los últimos meses han sido un período complicado para los anunciantes y para las marcas en general, también para los canales que viven de la publicidad. Muchas compañías han congelado su inversión, otras la han reorientado y algunas han tenido que rehacer por completo toda su estrategia. Los daños colaterales de la crisis del coronavirus son muchos, pero en el universo de la publicidad no se han repartido de forma equitativa.
Aunque algunos players han salido de los últimos meses en una situación mucho peor, los cambios vividos también han beneficiado a otros. En las conclusiones de lo que dejan los últimos meses, algunos canales publicitarios, como demuestra un análisis de Warc, son los grandes vencedores.
El primer gran ganador del año ha sido el ecommerce. El crecimiento ha sido brutal, ya que no solo los consumidores están comprando más en la red sino que además los marketeros le están prestando mucha más atención a lo que ocurre en esas plataformas.
Como explican desde Warc, los anunciantes quieren estar allí donde ocurren las compras y por eso están invirtiendo más y más dinero en publicidad en tiendas online. En el último año, la publicidad en ecommerce creció 30 veces más rápido que lo que lo hizo la media del mercado publicitario digital.
Todos estos cambios se mantendrán en cierto grado en el futuro inmediato, por mucho que los consumidores sigan prefiriendo comprar en tienda y por mucho que las cosas ya no sean exactamente como en 2020. Los marketeros deben comprender, eso sí, que necesitan ser flexibles. La flexibilidad es la clave del éxito, como demuestra por ejemplo el boom del click-and-collect y cómo cada vez más consumidores lo están empleando. En términos publicitarios esto permite hacer campañas más híbridas.
Las redes sociales han visto un año más que optimista. El tiempo de uso creció y la inversión publicitaria subió. La gran ganadora ha sido, explican desde Warc, TikTok. TikTok no solo vio como la actividad de los usuarios se doblaba en el último año, sino también cómo crecía la inversión de las marcas.
El crecimiento es tan notable que supera al de otras redes sociales: el 44% de los marketeros planea gastar más dinero en TikTok, por ejemplo, frente al 39% que lo hará en Facebook. Al mismo tiempo, las marcas deben trabajar lo orgánico y crear contenidos comprendiendo qué es lo auténtico en este terreno.
Al principio de la crisis del coronavirus se produjo un boom del consumo de contenidos televisivos. La tele se llevaba mucho más tiempo que nunca, pero fueron unos máximos históricos efímeros. Un espejismo.
El gran ganador fue el vídeo online en todas sus formas, desde el VoD al vídeo social. No por todos puede apostar el anunciante, porque no todos tienen anuncios, pero los que lo admiten se han llevado una gran subida de la inversión publicitaria.
YouTube ya roba inversión a la tele (y no solo se hace con sus anuncios, sino que cada vez los consumidores pasan más tiempo sentados frente al televisor, pero viendo vídeos de YouTube). Cada vez más consumidores no hacen diferencias entre ver la tele y ver contenidos como YouTube, lo que hace que la primera esté perdiendo todavía más peso.
Son de los elementos de moda y de los que todo el mundo parece estar hablando. Tienen nuevas audiencias, logran alto engagement y están captando a los anunciantes. Las proyecciones de gasto en patrocinios suben, pero también lo hacen las inversiones publicitarias en las plataformas de esta industria que aceptan anuncios directos.