
Las apps de mensajería siguen arrebatando tiempo y terreno a las redes sociales
Por Redacción - 5 Septiembre 2016
Posiblemente no sean pocos los usuarios de Facebook que ya lo han observado. Sus contactos comparten menos fotos de vacaciones, suben menos actualizaciones de estado e indican menos cosas en sus perfiles de lo que lo hacía hace unos años. Quizás es que el paso del tiempo ha hecho a esos usuarios que ven menos actividad entre sus contactos más mayores, como ha hecho a esos contactos, y a medida que uno se hace mayor se vuelve más reservado con lo que cuenta y lo que no de su vida privada. Quizás es simplemente que esa desaparición del contarlo todo es un síntoma más de que las cosas están cambiando y que está a punto de llegar una nueva era, la era de las apps de mensajería.
¿Por qué se podría pensar que los consumidores han migrado a las apps de mensajería? Por un lado, las redes sociales ya no son lo que eran, se podría decir, y han vivido cambios en los últimos tiempos que han hecho que algunos de sus usuarios no estén exactamente conformes con lo que tienen delante. Los sucesivos cambios en los algoritmos (o la directa incorporación de algoritmos a la gestión del feed de actualidad) han hecho que las redes sociales se hayan visto afectadas por más y más cambios. Lo que el usuario de la red social encontraba cuando se dio de alta en la misma no es necesariamente lo que se puede encontrar ahora mismo.
Por otro lado, las redes sociales han entrado de lleno en el juego de la publicidad. Para los medios online, se han convertido en unas nuevas poderosas enemigas, ya que están consiguiendo captar una parte cada vez más importante de los presupuestos de publicidad de las marcas. Para los usuarios de las mismas, se han convertido en más de lo mismo. Cuando llegaron al mercado era un entorno en la que la publicidad era escasa o inexistente. Ahora, y uno solo tiene que hacer scroll en el feed de Facebook para comprobarlo, se ha convertido en una especie de eterna constante.
Y, finalmente, las redes sociales se han convertido en uno de los elementos que más tensión generan en lo que a los consumidores se refiere en materia de privacidad. Las diferentes firmas del sector han empezado a saber demasiado sobre nosotros y están además empleando esa información en su estrategia de negocio. No es que los demás no lo hagan (al fin y al cabo, las cookies están ahí desde hace años y, nuevo al fin y al cabo, las apps de mensajería son el recipiente de información muy privada que podría ser muy útil si decidiesen emplearla), pero las redes sociales se han convertido en uno de los escenarios más visibles de esta cuestión y uno de los que ha protagonizado más y más críticas.
--- Regístrate o accede como usuario para disfrutar del acceso ilimitado a todos nuestros contenidos ---

